Quien desee optar por la nacionalidad guatemalteca deberá someterse a un examen del idioma español y de instrucción cívica. Para este efecto el Gobernador Departamental designará un tribunal examinador compuesto por tres maestros.

El examen del idioma será de carácter práctico, a fin de establecer si la persona entiende, habla, y escribe el español; y el de instrucción cívica versará sobre geografía e historia elementales de Centroamérica y conocimiento general de la Constitución de la República de Guatemala.

Posteriormente el expediente es remitido al Ministerio de Relaciones, quien evaluará la información y elevará el expediente, con informe y opinión a la Procuraduría General de la Nación, quien emite un dictamen, luego el expediente es trasladado a la Secretaría General de la Presidencia donde el presidente de la República, decidirá si se emite o no el acuerdo en que se disponga conceder la nacionalidad.

De ser aprobado, se emite un Acuerdo Gubernativo, pero este no acredita la nacionalidad, sino hasta la celebración de la ceremonia en la que se toma el juramento de renuncia a su nacionalidad, ya que Guatemala únicamente acepta una nacionalidad.